Al desplazar el vástago, el fluido necesario para ello, por ejemplo, aceite hidráulico, fluye hacia el interior del cilindro hidráulico o, de nuevo, hacia el exterior en el otro lado de acción.
La velocidad de flujo del fluido depende de la velocidad de desplazamiento y de la superficie de la sección transversal de los conductos de alimentación, especialmente en las conexiones y uniones roscadas. Una alta velocidad de flujo genera una mayor pérdida de presión en el accionamiento y, por tanto, una reducción del rendimiento hidráulico. Por lo tanto, la velocidad de flujo debe mantenerse lo más baja posible.
Las velocidades de aceite permitidas dependen de las propiedades del fluido. Las recomendaciones para aceites minerales pueden consultarse en la siguiente tabla.
Conductos de presión
| Presión nominal | > 3 bar | < 25 bar | > 63 bar | > 160 bar | > 250 bar |
| Velocidad del aceite admisible | < 3 m/s | < 5 m/s | < 6 m/s | < 8 m/s | < 10 m/s |
Conductos de retorno
| Velocidad del aceite admisible | < 3 m/s |
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